La Federación Unida de Planetas

Una federación de especies, generalmente humanoides, en el cuadrante alfa. La gente de la Federación es diversa y numerosa. La Federación es el estado más grande totalmente democrático conocido en la galaxia, y con el propósito de un mensaje de paz y buenaventura para todas las razas del universo.

La Federación se formó en 2161, en el planeta Babel. La Constitución de la Federación Unida de Planetas fue firmada por los gobiernos de la Tierra, Andor, Vulcan y muchos otros, para proveer una defensa común frente al amenazador Imperio Romulano. Esta Constitución provee derechos y libertad a todas las razas, un gobierno representativo democrático con sufragio universal, y establece la creación de la Flota Estelar, la agencia del gobierno encargada de representar y defender la Federación, y explorar la galaxia.

No existe una sola cultura de la Federación. Algunas especies, como los vulcanos, tienen una base social, religiosa y cultural unificada. Los humanos, en cambio, están unificados como pueblo, pero mantienen diferentes valores culturales. Hay cerca de 150 planetas miembros de la Federación, creando un mosaico de culturas y tradiciones, unidos por el interés común: paz, orden, libertad y la búsqueda de conocimiento.

Los miembros de la Federación Unida de Planetas están representados en su gobierno. El Gobierno está dividido en tres poderes: legislativo, ejecutivo y judicial. El Consejo de la Federación, compuesto por representantes de cada planeta, crea y sansiona las leyes. El Consejo está encabezado por el Presidente, quien examina la administración de los representantes de la ley en asuntos externos. El sistema judicial juzga y pena a los que hayan violado estas leyes o tratos con otras naciones, sobre la suposición de que el acusado es inocente hasta que se declare lo contrario.

Pero a pesar del gran poder instaurado en el Gobierno, este está limitado por sí mismo. La Constitución contiene garantías de las libertades individuales que no pueden ser desestimadas por las leyes de la Federación. Estos derechos son complementados por las leyes planetarias, como el Tratado de Derechos Vulcano. Los derechos de los ciudadanos antes de ir a un tribunal son expuestos en un Codigo Uniforme de Justicia, para protergerlos de un juicio injusto.

El Consejo de la Federación se sitúa en San Francisco, en el planeta Tierra. La oficina del Presidente está en París, también en la Tierra.

Más allá de que la Federación tiene naturaleza pacífica, su historia está teñida de conflictos. Hasta hace muy poco tiempo, los Romulanos eran una permanente amenaza. En 2218, devino el primer contacto con una raza de guerreros conocida como el Imperio Klingon. Las malas relaciones en los primeros tiempos condujeron a medio siglo de violencia, hasta el Tratado Organian de 2267, seguido por la Conferencia de Khitomer en 2293.

En la década del 2350 estalló la guerra entre la Federación y la Unión Cardassiana, que terminó con un cese al fuego y a un eventual tratado en 2366. Pero las hostilidades continuaron por años.

La amenaza a la soberanía de la Confederación continuó cuando se estableció el primer contacto con los Borg, una colectiva de humanoides tecnológicamente avanzados cuyo deseo es asimilar a todas las razas para darle orden a la galaxia. Otro poder perteneciente al cuadrante gamma, el Dominio, reclamó que sea establecido un nuevo orden en el cuadrante alfa, mediante un wormhole descubierto cerca de la estación Deep Space Nine. La amenaza del Dominio creció por su alianza con los cardassianos. Pero eso fortaleció la ayuda entre la Federación, los Klingon y los Romulanos, creándose una fuerza militar unida del cuadrante alfa. Posteriormente los Romulanos firmaron un tratado de no agresión que los separó del conflicto.